"Si no fuera por la atracción de la Tierra, un hombre podría lanzar a otro, únicamente con un soplido, a las profundidades del espacio, sin posible retorno durante toda la eternidad."
Me imagino a un grupo de niños alrededor de una tarta, todos con los codos apoyados en la mesa excepto uno, que se sostiene en ella sobre sus manos, con los dedos orientados hacia él, los brazos extendidos y con la mirada fija en el pastel. De repente, un deseo y decenas de niños volando por los alrededores.
Los más previsores se habrían atado con serpentina a la pata de la mesa. El resto, simplemente dirían: "que cumplas muchos más, cabr*n", y se alejarían sin remedio para no volver jamás.
Hay que ver las cosas que se me ocurren cuando no tengo nada en qué pensar (o no quiero acordarme de ello)...
Jojojojojo. ¡Qué distintos serían los cumpleaños!
ResponderEliminarMe imagino a un grupo de niños alrededor de una tarta, todos con los codos apoyados en la mesa excepto uno, que se sostiene en ella sobre sus manos, con los dedos orientados hacia él, los brazos extendidos y con la mirada fija en el pastel. De repente, un deseo y decenas de niños volando por los alrededores.
Los más previsores se habrían atado con serpentina a la pata de la mesa. El resto, simplemente dirían: "que cumplas muchos más, cabr*n", y se alejarían sin remedio para no volver jamás.
Hay que ver las cosas que se me ocurren cuando no tengo nada en qué pensar (o no quiero acordarme de ello)...